Si eres amante del pescado y buscas una opción fácil y deliciosa, ¡la merluza en salsa verde es para ti! Este plato es típico en la gastronomía española y se prepara con una salsa a base de perejil, ajo, aceite y caldo. En este artículo te enseñaremos a cocinar una merluza en salsa verde paso a paso y en poco tiempo, ¡para que puedas disfrutar de un plato sabroso y saludable!
Preparando la salsa verde para nuestra merluza
Lo primero que debemos hacer es picar finamente un par de dientes de ajo y un buen manojo de perejil fresco. Luego, en una sartén, calentamos un poco de aceite de oliva y añadimos el ajo picado. Dejamos que se dore un poco y luego agregamos el perejil. Sofreímos durante unos minutos a fuego bajo para que el perejil se cocine un poco y libere su aroma.
Una vez que el perejil esté cocido, añadimos un poco de caldo (puede ser de pescado o de verduras) y un chorrito de vino blanco. Mezclamos todos los ingredientes y dejamos que la salsa se cocine durante unos 5-10 minutos a fuego medio-bajo. La salsa debe quedar espesa pero no demasiado densa, así que si es necesario puedes añadir un poco más de caldo.
Cocinando la merluza con nuestra deliciosa salsa verde
En otra sartén, calentamos un poco de aceite de oliva y añadimos la merluza previamente sazonada con sal y pimienta. Cocinamos la merluza a fuego medio durante unos 3-4 minutos por cada lado, hasta que esté dorada por fuera pero jugosa por dentro. Una vez que la merluza esté cocida, la sacamos de la sartén y la dejamos reposar unos minutos.
En la misma sartén donde cocinamos la merluza, añadimos la salsa verde que preparamos anteriormente. Dejamos que la salsa se caliente durante unos minutos y luego la vertemos sobre la merluza. Podemos decorar con un poco de perejil fresco picado y servir caliente.
¡Y listo! Ya tienes tu merluza en salsa verde lista para disfrutar. Este plato es perfecto para una cena saludable y sabrosa, así que ¡no dudes en probarlo!
Con esta receta fácil y deliciosa podrás preparar una merluza en salsa verde en pocos minutos. El resultado es un plato ligero y sabroso que seguro encantará a toda la familia. Recuerda que puedes adaptar esta receta a tus gustos personales y añadir otros ingredientes como almejas o gambas para darle un toque extra de sabor. ¡Buen provecho!
